Los estudiosos que más han influido en el vasco-iberismo

Las Fuentes. Tuve la oportunidad de leer entre otros, a P.P. Astarloa, Gregorio Mayans y Siscar, el Diccionario de R. M. de Azkue, en mí opinión el mejor diccionario vasco que existe. Koldo Michelena, Antonio Tovar, Miguel de Unamuno, Miguel de Azaola, Wilhem Von Humboldt, Joan Corominas, P. Bosch Gimpera, Fernando Sarrailh de Ihartza, Caro Baroja, Fcº García Berlanga,  Domingo  Fletcher Valls, Juan Faus Cardona. Jürgen Untermann, Patxi Aguinagalde, Román del Cerro. Antonio Arnaiz Villena y Jorge Alonso García.

     Y los que más han influido en mis ideas sobre el vasco-iberismo, por estar en lo básico de común acuerdo con ellos, han  sido: P. P. Astarloa, Wilhem von  humboldt, Patxi Aguinagalde, Fº. Garcia Berlanga, Domingo Fletcher Valls, y Juan Faus Cardona. Y posteriormente los trabajos de Antonio Arnaiz Villena y Jorge Alonso García, han confir-mado por otras vías, sobre todo, a través del estudio de las estelas funerarias y de la genética, lo mismo que yo había creído ver a través de la toponimia.     
     He tenido la suerte de poder contar con la amistad y el apoyo de grandes vasco-iberistas, como: Fº. García Berlanga, Domingo Fletcher Valls, y Juan Faus Cardona. 
     Sé que es muy  difícil sintetizar en estas pocas páginas, todo lo que me hubiera gustado decir, de ¿Son o no son los vascos iberos? y de El origen ibero-tartésico del euskera. Pero el tiempo manda. 
—————-   
     Y sospecho, que los nombres BEN y MEN eran derivados de una misma palabra, no sé cual de las dos sería la más antigua. Son muchos los topónimos que parecen indicarlo, como: Montiel y Beniel, Montecasino y Benicasim, Montecarlo y Benicarlo. etc         

Briga y la toponimia ibérica

El estudio de la toponimia ibérica, me ha permitido descubrir cosas que posiblemente de ninguna otra manera lo hubiera podido hacer, como poder ver la relación entre el tartésico, ibérico, vasco, berebere, etrusco, y griego jónico, por tener todos ellos una misma base toponímica común.           
     Este estudio, me hizo llegar a comprender el origen y significado de muchos nombres, de los que no sabía ni el significado ni el origen.
     Sólo a través de la estructura gramatical del vasco, se ha descifrado y se está descifrando nuestra toponimia.
     Briga.
     Astarloa nos dice sobre Briga: <Briga: quiere decir despoblado ó cosa de él, y de ninguna manera población. Para Astarloa, Briga era una palabra inequívocamente vascongada.
     Humboldt, coincidía con la mayor parte de las tesis de Astarloa, pero no en el origen del nombre Briga, que él creía que era de origen céltico.
     Fº. García Berlanga, (buen amigo mío) nos dice: <Hace tiempo que venimos pensando que la palabra Briga es euskérica. Podemos suponer que Briga es variación de BIRIGA que a su vez lo fue de IRIGA.
     Hemos visto las opiniones de Astarloa, Humboldt y García Berlanga, que en mi opinión son de las más razonables e inteligentes de cuántos en aquella época y en esta, se han ocupado del tema. Las de Humboldt coincidían en buena parte, con las de Lorenzo Hervás y Panduro, uno de los mejores lingüistas junto con Humboldt de aquella época.
     Astarloa coincidía con Humboldt y Hervás, sobre las tesis vasco-iberistas, pero no coincidía con ellos, ni en el origen de la palabra BRIGA ni sobre la Identidad de los CELTIBEROS.
     Humboldt nos dice: <También se ha explicado briva por brüke: “puente”, basándose únicamente en Samarobriva (Puente del Somme), aunque Mannert recuerda oportunamente (P. 2, t. l, p. 196) que para el nombre del río, nunca mencionado expresamente por los antiguos, no se dispone de otra prueba que el nombre de la ciudad. Es preciso decir, sin embargo, que en los nombres de lugar donde esta terminación aparece, se revela siempre la idea de agua.      
     Astarloa nos dice: <Para hacer más evidente que la terminación Briga es Bascongada, hacemos presentes a los literatos, que por más que se reconozcan todos los demás países, sólo se hallaran dos pueblos con esta terminación: Samaro-briga hoy Amiens; y Arto-briga, hoy Ratisbona>.
      Y más adelante añade: 
     “Samarobriga: es voz compuesta de Zamari, Zamarija, que significa bestia de carga, y Briga terminación que hoy denota Pueblo ó Ciudad: “Samarobriga” todo junto quiere decir Ciudad ó pueblo de bestias de carga, ó donde hay de estas bestias.>
      Ciudades o pueblos de bestias de carga, eran todos los pueblos o ciudades, una cosa que está en todas partes, no suele singularizar el nombre de un pueblo; sin embargo Puente para bestias de carga, tiene su lógica. Pues había y hay, caminos pequeños llamados de herradura, que es el de las bestias de carga; y había y hay, caminos más grandes, llamados de carro. Por lo que había puentes para las dos clases de caminos.
     El significado de Briga. García Berlanga, en mi opinión, acertó en que BRIGA era contracción de BIR-IGA, pero erró en el significado del mismo, cuando escribió: <Palabra variación de BIRIGA y antes IRIGA, “De la ciudad”.
     BRIGA, es una contracción de BIRIGA, como acertadamente vio Berlanga, que traducimos por BIR-IGA, de BIR = RÍO y IGA = SUBIR, con el significado de “PUENTE”. No “ciudad de”, como pensaba Berlanga, ni “descampado”, como pensaba Astarloa. Estos puentes parece ser que aparecieron por la necesidad de cruzar los ríos, que tenía la trashumancia. Por eso no es de extrañar que la gran mayoría de los nombres BRIGA, estén en lugares donde se practicaba la misma. 
     Conclusión. Posteriormente pude observar a través de la toponimia, que los restos de esta antigua lengua prehistórica, los encontramos diseminados por numerosos países, y no solamente en su toponimia, sino también en mayor o menor medida a través del léxico de sus respectivas lenguas. Además de la toponimia, los apellidos, y el léxico vasco relacionado con su  toponimia, estudié también la toponimia de las Islas Británicas, Italia, Francia, el Norte de África, Oriente Medio y Grecia. Así, como comparaciones entre el vasco y antiguos nombres de Sumeria y Egipto. Mi pasión por la toponimia, me hizo recorrer muchos miles de Kms. A  través de todas las provincias españolas, a excepción de las Islas Canarias, que he estudiado a través de mapas y atlas geográficos. Todos estos viajes efectuados durante los últimos 35 años, para poder observar con detenimiento la situación geográfica de los lugares que estudiaba, me ha dado una cierta seguridad adicional, para la traducción de los mismos. Esto me permitió hacer un corto, pero bastante preciso diccionario de los mismos, que incluí en mi libro El Origen Ibero-Tartésico del Euskera

La presencia de los iberos en las Islas Británicas

En la página 194 de ¿Son o no son, los vascos iberos? Escribí lo que sigue: <<En el suplemento de The New York Times, que sale los jueves en el periódico EL PAÍS. Ha salido hoy día 22 de Marzo de 2007, un artículo de Nicholas Wade, titulado Un reino dividido podría estar unido de hecho por lazos de sangre.
      Del que extracto lo que sigue: <<Gran Bretaña e irlanda están tan profundamente divididas en su historia que no hay una sola palabra para referirse a los habitantes de ambas islas. Los historiadores enseñan que básicamente descienden de pueblos distintos: los irlandeses de los celtas y los ingleses de los anglosajones, que invadieron el norte de Europa y expulsaron a los celtas a las periferias occidental y septentrional del país.
Pero genetistas que han realizado pruebas de ADN por todas las Islas Británicas avanzan hacia otra conclusión. A muchos les sorprende las múltiples similitudes genéticas, que han llevado a algunos a afirmar que tanto Gran Bretaña como Irlanda han estado habitadas durante miles de años por un único pueblo mayoritario, con sólo algunas escasas incorporaciones por parte de invasores posteriores como los celtas, los romanos, los anglos, los sajones, los vikingos y los normandos.>>
     Y sigue:<<Las pruebas genéticas siguen en fase de desarrollo, y debido a que sólo pueden extraerse de ellas unas fechas muy aproximadas, es difícil hacerse una idea general de los orígenes británicos e irlandeses a partir de los datos de ADN, la arqueología, la historia y la lingüística.
     Pero esto no ha frenado el intento. Stephen Oppenheimer, un genetista médico de la Universidad de Oxford, señala que la versión de los historiadores es errónea en casi todos los detalles.>>
     Y sigue: <<En total, unas tres cuartas partes de los antepasados de las poblaciones británica e irlandesa actuales llegaron entre 15.000 y 7.500 años atrás, cuando la subida del nivel del mar separó a Gran Bretaña de Europa y entre sí.>>
     Y sigue: <<Irlanda fue la que recibió un número inferior de invasores posteriores; su ADN constituye aproximadamente un 12% del acervo genético irlandés, opina Oppenheimer. El ADN de los invasores supone un 20% del conjunto genético en Gales, un 30% en Escocia, y en torno a un tercio en el este y sur de Inglaterra.
    ¿A  QUÉ  LLAMAMOS  CELTAS?
   Pero ningún grupo de invasores en particular es responsable de más de un 5% del acervo genético actual, afirma Oppenheimer basándose en datos genéticos.>>
     Sigue: <<La historia de Oppenheimer sobre la población de las Islas Británicas no sólo recurre a los datos genéticos, sino también a la datación de cambios lingüísticos mediante métodos desarrollados por genetistas.
     En general, los historiadores han dado por sentado que, cuando llegaron los romanos, en toda Gran Bretaña se hablaba celta.
     Pero Oppenheimer afirma que la ausencia de topónimos celtas –los nombres de lugares son especialmente duraderos- lo hace improbable.>>
<<Exposición de datos.     
 Iberos del norte. Son los principales ancestros de las poblaciones británica e irlandesa actuales. Y sus primeros pobladores.
Hace unos 20.000 años. Los glaciares empujaron a los habitantes de las Islas Británicas a refugios más al sur, como España.
Hace 15.000 años. Cuando los glaciares se retiraron, la gente                  -cazadores recolectores, que quizá hablaran una lengua similar al vasco- llegaron de España caminando por la costa atlántica. (El canal de la Mancha y el mar de Irlanda todavía son tierra).
Hace entre 12.300 y 11.500 años. Los pobladores sobrevivieron a otra glaciación, llamada Younger Dryas.
Hace entre 10.000 y 8.500 años. Gran Bretaña e Irlanda se separan una de otra y del continente.
Hace 6.000 años. Se introduce la agricultura, quizá por gente de habla celta. Las técnicas agrícolas y el lenguaje se extendieron por Irlanda y la costa oeste de la Gran Bretaña.
Hace entre 6.000 y 4.000 años. Agricultores inmigrantes del norte de Europa incidieron en la costa sur.
Hace 1950 años. Los romanos invadieron Gran Bretaña. Una primera forma de inglés -no celta- pudiera ya hablarse en partes del sur de Inglaterra.
Hace 1.550 años. Las invasiones anglosajonas, aportan una cifra de gente mucho menor de lo que se cree.
Hace 950 años. Los invasores normandos quizá no sumaran más de un 5% de la población.
     Como conclusión del artículo, escribí:
Me he alegrado, de haber tenido la oportunidad de leer el artículo de Nicholas Wade, sobre el trabajo de Stephen Oppenheimer.
     Pues yo hace más de 35 años, que empecé a darme cuenta de la relación que había, entre los apellidos y la toponimia británica, con la estructura del vasco, y con nuestra toponimia. Porque veía, que una buena parte de esta toponimia principalmente de Escocia, sólo era posible abordarla desde la estructura gramatical del vasco. O sea, que mi opinión coincide totalmente con la de Oppenheimer, aunque él, ha llegado a esta conclusión por el estudio de la genética, y yo, a través de la toponimia.
     Después de repasar The COLLINS SPURREL WELSH DICTIONARY, no encontré ni rastro de celta, en la toponimia británica. Por eso cuando hablamos de los celtas, primero debemos aclarar qué entendemos por celtas. Yo entiendo por lengua celta, a la lengua galesa, que es totalmente diferente, al resto de lenguas británicas. Y no le veo ninguna relación, con la toponimia de Irlanda, de Escocia, o de Inglaterra.

Relación del ibérico, el valenciano y el castellano

Esta antigua lengua prehistórica, era tan precisa como bien estructurada. Muchas veces también utiliza la misma palabra o derivaciones de la misma, para poder expresar cosas distintas, pudiendo significar tanto un tema material, como anatómico o incluso psicológico, viéndose abundantes pruebas de ello en innumerables ejemplos. Vamos a ver unos pocos ejemplos de ello, comparando el léxico vasco, con el valenciano actual, como:

 Valenciano.     Vasco.         Castellano.
 Aixa.                Haitzur.         Azada.
La azada la llamamos los valencianos AIXA, y en vasco aixa significa piedra. Recordemos que antiguamente las azadas las hacían de piedra.
 Pitxer.               Pitxer.           Jarra.
En vasco la “jarra” también se llama pitxer, como en valenciano.
 Taula.            Mai           Mesa.   En valenciano la mesa se llama TAULA y TAULA en vasco significa TABLA. 
 Cadira.                Silla.                Silla.
En vasco y castellano la “silla” se llama igual, y en valenciano se llama CADIRA, que casualmente es el nombre que le dan a la SILLA, en el dialecto vasco de LABORT (País Vasco-Francés).
 Beure.                   Edan.               Beber.
Beber en vasco se llama EDAN, y en valenciano BEURE, BE-URE, lo traducimos desde el vasco por BE = BAJO y URE = AGUA, con el significado de “agua baja”. Como el agua siempre va por la parte más baja que encuentra, y los poblados para protegerse mejor solían estar en sitios altos. Para poder beber, debían bajar a por el agua, y esta acción de bajar a por agua, es la que ha perdurado en valenciano para designar la palabra beber. El mismo origen le veo a la castellana BEBER, que desde el vasco-ibérico traducimos por BE = BAJO y BER = RIO, con el significado también de “río bajo”. Una vez más gracias al vasco podemos ver el origen ibérico de muchas palabras valencianas y castellanas.      
 Sak.                         Zaku.                 Saco.
 Corda.                     Korda.               Cuerda.
 Pot.                          Poto.                   Bote.
 Fruita.                     Fruitu.                Fruto.
 Caixa.                       Kaxa.                 Caja.
 Caixo.                       Kaxoi.                 Cajón.
 Txiulit.                      Txilibitu.            Pito.
 Ganivet.                    Ganibet.             Cuchillo.
 Oli.                            Olio.                    Aceite.
 Pixar.                        Pix egin.               Mear.
Lo más probable, es que pixar en valenciano sea una contracción de la palabra vasca pix-ari.
 Escurar.                     Garbitu.                Limpieza.
En valenciano limpiar los utensilios de la cocina se llama escurar, y es contracción de las palabras vascas ESKU-URA-ARI, que traducimos por esku = mano; ura = agua y ari = hacer, con el significado de “hacer (limpiar) con la mano y el agua”.                                   
Fil.                              Firu.                       Hilo.
Tanto fil, firu y hilo, parecen tener el mismo origen, pues es muy común el cambio de F a H, y de la L a R. como vemos en hermosa y fermosa, y en huelga y huerga, blusa y brusa, etc.           
 Eixir.                            Irten.                     Salir.
Vemos que el verbo IR, va al final del nombre en valenciano y castellano, mientras que en vasco, IR va al principio de la palabra.
      La palabra valenciana EIX-IR, la traducimos por eix = piedra, e ir = ir, con el probable significado de salir de la piedra. ¿Qué me induce a pensar así? Me induce a pensar así, el que a las caballerías aquí en Valencia, cuando se las quiere hacer retroceder, se usa la expresión aixa arrere. Estas expresiones valencianas, parecen tener su origen en la época neolítica, cuando aún se vivía en cuevas.     
      Cocina en vasco se llama SUKALDE. Y en valenciano SUC significa caldo y también jugo y zumo. Hay una comida muy popular entre los valencianos, que se llama SUC de anguila, que como su nombre indica es un guiso hecho con anguilas. ZUKU en vasco también significa “caldo”. Y cuando una comida o cualquier otra cosa se ha “quemado”, decimos que está SUCARRA o SUCARRAT, Y el mismo origen tiene “llamarada” en vasco que llaman SUGARRALDI, que cambiando la C por la G, se convierte en la misma palabra. Porque de SUGARRA-ALDI, el ALDI final equivale a “tiempo”. Y estas palabras valencianas de origen ibérico que empiezan por SU, tienen el mismo origen que la palabra vasca SU que también significa “fuego”.  
      Vamos a ver, como palabras ibéricas usadas en toponimia, tienen también un significado anatómico, a través de la lengua valenciana:
      Cuello en valenciano se llama COLL equivalente y variante de COI y GOI.
      Seguimos con “garganta”, que en valenciano se llama GOLA, que traducimos por GOL-A, de GOL = ALTO y A = EL. Con el significado de el alto.
      Cogote se llama en valenciano TOS, que traducimos por TO-OS, de TO = ALTO y OS = FRÍO. Con el significado de alto frío.  
      Ojo se llama en valenciano ULL. Y en valenciano ULL, además de OJO, significa también un “nacimiento de agua”. ULL y UR en toponimia significan “agua o río”. Como en el río ULLA, y els ULLALS de Pego. Posiblemente se le llamara al ojo Ull, por el lagrimal.
      Pie se llama PEU en valenciano, que traducimos por PE-U, de PE variante de BE = BAJO, y U variante de O = “alto”. Con el significado de bajo alto, que es la situación que ocupa el “pie”, en comparación al resto del cuerpo. U y O algunas veces además de “alto”, también significan agua.
      Espalda en valenciano se llama ASQUENA, y en vasco ASKENA, significa lo último, fin, detrás. Y “asquena”, es la parte trasera del cuerpo.
     Oreja en valenciano se llama ORELLA, que traducimos por OR-ELL-A, de OR = CIMA o SOBRE, ELL = ESTRECHO-A, y A = LA, EL. Con el significado de la “la cima estrecha”.
      Nariz en valenciano se llama NAS y en vasco se llama SUDUR, sospecho, no sé si con bastante fundamento, que NAS, llevaba en su origen una A-, (como en tantas palabras ibéricas y españolas), al principio del nombre, y se llamaría ANAS, que traduciríamos por AN-AS, de AN = grande y AS = peña, con el significado de “peña grande”.
      Ceja se llama SELLA en valenciano, y en vasco SELLA, SELA, y CELA, quieren decir prado o campo. No sé si la similitud entre las hierbas del prado, y los pelos de la CEJA han tenido algo que ver en la formación del nombre SELLA. Tanto CELA, como SELLA, son los nombres actuales de dos pueblos valencianos.

La Font de la Figuera

La Font de la Figuera. Está registrado con este mismo nombre desde mediados del siglo XIII: 1238. El botánico valenciano Cavanilles, escribió hace 200 años lo que sigue: “Además de la Redonda, que es la  porción privilegiada del término, cultivan con cuidado los distritos llamados  Carrascal y Bobalar: aquel es un viñedo hermoso, que se presenta al “baxar el Puerto de Almansa”.

      He remarcado las últimas palabras de Cavanilles, “baxar el Puerto de Almansa”, porque en mi opinión, son la clave para el desciframiento del topónimo. Ha estado documentado como “Higuera y Figuera”. Y en mi opinión, tanto “higuera, como figuera” tienen su origen en la palabra ibérica “igoera”, que significa la “subida”. Una vez desaparecida la lengua ibérica, quedó el topónimo, y como “igoera” ya no les decía nada, fue muy fácil para los escribanos, o para la gente del lugar, transformar “Igoera” en “Higuera” o Figuera”, que sí tenía significado para ellos. Pero ahí quedó la “subida”, porque el nombre desapareció, pero la subida no. Y su significado parece ser La fuente de la subida = igoera.

Ayelo

Ayelo. (Rectificación) En la página 169 de mi libro “El Origen ibero-tartésico del euskera”, lo tengo traducido como Ay-el-o. de Ay o Ai = Paso, el = estrecho, y o = variante de a = el. Con el significado de El Paso estrecho.

      La o en alguna ocasión, después de la romanización y por causa de la misma, algunas veces ha sustituido al antiguo artículo ibérico y vasco –a =  el o la. Pero además la o, en toponimia también significa alto o sobre. Y algunas veces la o también significa agua, como variante de u.  En francés el agua también se pronuncia o, aunque la escriban eau. Este es uno de los motivos, por lo que es muy importante conocer la situación geográfica del nombre del lugar. Por que de lo contrario, la polisemia te puede despistar sobre el significado de algún topónimo, como me ha pasado a mí con Ayelo, a pesar de conocer muy bien su situación geográfica.
       Esta antigua lengua tiene una gran precisión, y me di cuenta que Ayelo, se traducía por Ay-el-o. La traducción es la misma, pero la interpretación de la –o  final es diferente. Y su traducción última es ai = paso, el = estrecho y o = sobre o alto, con el significado de “Sobre el paso estrecho” o “El alto del paso estrecho”, que ahora si que define exactamente la situación geográfica de Ai-el-o, situada en la parte de arriba del Pas del estret, que es como llamamos en valenciano al conocido Paso del estrecho. 

La Carrasqueta

La Carrasqueta. Está situado entre Alcoy y Xixona. Y lo traducimos por “Carr-asq-eta, de carr = camino, en ibérico, asq o ask = peña en vasco, y eta = pluralidad, también en vasco, con el significado de “camino del peñascal”. Es un puerto de montaña de 1020 m. de altura, que refleja exactamente la situación del terreno.  Y como en tantos otros topónimos, el nombre ha perdurado íntegro hasta nuestros días y su situación geográfica también. Y gracias al vasco hemos recuperado también, el significado de su antiguo nombre ibérico.

Benidorm

Benidorm. En mi opinión, Benidorm dejó de ser el nombre de una partida de terreno,  para convertirse en el nombre del pueblo, a partir de la construcción de su castillo. Desde entonces, a Benidorm se le conoció con el nombre de Castillo de Benidorm. Y cuando desapareció el castillo, quedó como nombre Benidorm, que en realidad era el nombre de la partida de terreno donde se había asentado el castillo.

     A Benidorm lo traducimos por Ben-idor-orm.  De Ben = Cerro o Monte, en ibérico.  idor = seco o seca en vasco. y orma = ladera o pared igualmente en vasco. Con el significado de “El monte o cerro de las laderas secas”, que refleja exactamente la partida de terreno llamada del “castillo” que domina las dos playas.
     Quiero hacer constar que en la documentación antigua Benidorm, viene también registrado con el nombre Benidorma. Ben-idor-orma, que se pronunciaría Benidorma, debido a que el vasco  ibérico  no suele duplicarse en toponimia, cuando empiezan y terminan por la misma silaba.

Montaverner

Montaverner. Para Corominas, Montaverner es de origen árabe, y para los autores de Documentos y Datos, el topónimo tiene su origen en el latín.

      En mi opinión, Montaverner es de origen ibérico, Monta-, es de la misma raíz vasca que Munta y Muntatu. El nombre Mont abunda en toda la península y la –a final, de Mont-a, es el artículo. Mont-a,  significa “El alto o Sobre el alto”.

      El radical ver-, como hidrónimo, lo encontramos también en su variante Ber, en Ber-meo, Ber-gara, Ber-nedo, por citar sólo hidrónimos del País Vasco.
      Ner, en toponimia lo he visto como abundantivo, y no le veo ninguna relación con el vasco coloquial Nere, Ner, que traducimos por Mio, De mí.
      Como abundantivo o pluralidad lo encontramos con la misma grafía y significado en la ría NER-vión, en Bilbao, que traducimos por Ner-vi-on, de Ner = Abundante, vi variante de bi = río, y on locativo, con el significado de “Río abundante” o “Junto al río abundante”. Cualquiera que conozca Bilbao, sabe que su ría reúne estas características.
      Montaverner, se halla situado sobre el declive de una loma, donde bajo la misma, se juntan los ríos Albaida y Ontinyent, que los que somos de Montaverner llamamos, “la xunta dels dos rius” o sea “la junta de los dos ríos”. Si hubiera un sólo río debajo del declive de la loma, se podría llamar Monta-ver, o sea Sobre el Río, pero al ser dos los ríos implicados, justifica el aumentativo Ner.    
      A Monta-ver-ner, lo traducimos por Monta = Sobre, o El alto de. Ver o Ber = Río y Ner = Abundantivo. Con el significado de “Sobre los ríos” o “El alto de los ríos”.

El origen común de los antiguos británicos y los ibéricos

Apellidos y topónimos británicos. Casi al mismo tiempo que empecé a comparar la toponimia valenciana con la toponimia y los apellidos  vascos, empecé a comparar también estos últimos, con los apellidos y topónimos británicos. Al principio me sorprendió ver la cantidad, tanto de apellidos, como de topónimos británicos, que coincidían con otros topónimos y apellidos de toda la península ibérica. Fueron estas coincidencias las que me impulsaron a estudiar a fondo el tema, y llegué a la conclusión de que la toponimia ibérica y la británica estaban mucho más relacionadas de lo que nunca hubiera imaginado.  

     Vamos a ver una serie de topónimos, la mayoría de ellos escoceses, que me parecen relacionados con los nombres vasco-ibéricos, como: Aros Castle, Duart Castle, Gordons, Aldie Castle, Garve, Carrick Castle, Oban, Mote of Urr, Ascog, Ardgay, Segurr, Ulapool, Tarbet, Tarbert, Arrochair, Turnberry, Corrie, Errogie, Altnaharra, Urquart, Cove, Aberdeen, Arrusdale, Askaig, Arinagour, Ardlusa, Aberdeldie, Balmoral, Orchy, Arisaig, Morar, Arran, Barra, Oronsay, Collonsay, Harris, Bolivanick, Iona, Barhill, Invergarry, Flodigarry, Ulls Water, Ulls Brook, Ormstone, Ormsroad, Ormskirk, Morangie, Bellochhantuy, Annan,  Arkaig, Tornes.  
     Apellidos británicos relacionados con otros vasco-Ibéricos:
Erro, Berri, Ure, Ara, Ormsrod, Andi, Gandi, Coia, Coy, Harrap, Moss, Lang, Ormstone, Aldie, Harrow, Harrigan, Arkle, Ayr, Aldene, Gore, Alloa, Oran, Arran, Harker, Indoe, Igoe, Izatt, Urie, Olleren, Guinnes, Maitland, Sagar, Hurd, May, Cobain, Etchells, Scurr, Gosport, Ardie,  Gary, Scurra, Storr, Maguire, Joy, Cale, Kale, Chappel, Gare, Ottey, Burrell, Bordes, Anders, Ormiston, Cord, Gay, Garbutt, Oban, Coy, Ordish, Orrol, Atherton, Coe, Abergaverri, More, Tyrie, Oston, Gorland, Allender, Irchester, Tarbet, Tarbert, Tyrrell, Scorer. Cardones,
Iber, Ibbet, Ibison, Tebison, Sibery, Daroch, Cox, Ebo, Chivas, Chester, Che, Garrigan, Cardones, Moran, Millan, Martin, Noble, Mayor, Machin, Lomas, Garrity. etc.
     Y con otros valencianos, como: Ross, Pratt, Platt, Barri, Rhodes, Mercer, Barber, Camp, Barbera, Carter, Coll, Bell, Fraser, Falconer, Palmer, Major, Barret, Draper, Sargent, Govern, Bennet, Amats, Oliver, Rich, Sellers, Morell, Porter, Potts, Port, Garrod, Ivers, Gilbert, Gil,  etc. 
     A algunos apellidos británicos les cambias la –E final por la –A, y se le ve más el parecido con los apellidos ibéricos, como: Ure = Ura,  Gore = Gora,  Indoe  = Indoa,  Igoe = Igoa, More = Mora, Mole = Mola,  Coe = Coa, Gare = Gara, Urie = Uria, Cove = Cova, etc. 
     Comprobé también que nombres como: BEN, y BENI, son apellidos británicos y no tienen nada que ver con el árabe. 
     Una cosa que también me llamó mucho la atención, es, que en Escocia a los montes se les llama BEN y a algunos, se les llama BEN MORE, y es coincidencia, que en ibérico a los montes se les llame también BEN, BIN, BEN-A, PEN-A y BIN-A o PIN-A. Si además en toponimia ibérica MORA, significa “el alto”, entonces no sería descabellado pensar, que BEN MORE, pudiera significar “el monte alto”.

Presentación

   

Bernat  Mira  Tormo           Benidorm  2011

     Mi interés por el vasco-iberismo, empezó hace casi 40 años, y fue consecuencia de mi interés por conocer tanto el origen, como el significado de los nombres de nuestra toponimia.

     Por la gran cantidad de nombres que en la Comunidad Valenciana  empiezan por BEN, BENI y BENA, pensé en un principio, que podrían ser de origen árabe.
     Pronto deseché la idea de que fueran de origen árabe, pues a pesar que había muchos nombres, como: Ben-isso, Beni-arres, Ben-ixama, Beni-aya, Ben-issa, Beni-opa, Beni-achar, Beni-arda, Ben-illoba,  Beni-suera, Ben-idorm, etc. Cuando rascabas un poco te dabas cuenta, que de árabe tenían sólo Ben, Beni o Bena, que significan “hijos de” en árabe. El resto del  nombre que seguía a continuación, solía ser en la mayoría de los casos su antiguo nombre ibérico. Siendo algunos de ellos todavía, topónimos actuales del País Vasco y Navarra. 
     Poco después pude comprobar, que algunos BEN o BENA, no tenían ninguna relación con el árabe, sino que todo parece indicar que son nombres mozárabes de origen ibérico. Lo que sí que me iba quedando claro, es, que para conocer el significado de la mayor parte de nuestros topónimos, sólo había un camino, y este camino era el vasco y su estructura lingüística.
     Otra cosa que tenía bastante clara también, era la relación con el vasco, de topónimos, como: Zarra, Tolosa, cerca de Zarra, en el municipio de Alcalá del Jucar, (Albacete). Aldaya, Aspe, Orba, Atzubia, Aixetiva, Oriola, Alcoi, Ibi, Tibi, Onil, Xabia, Ayora, Ondara, Gorga, Llauri, Biar, Gavarda, Garaita, Ares, Gaianes, Alboraya, Arta, Aitana, Orxeta, Olleria, Onda, Anna, Mariola, Aixorta, Moraira, Alzira, Cirat, Ador, Altxor, Colaita, Xera, Eixaló, Xaló, Gandia, Atzeneta, Segura, Coraitxa o Coratxa, Bastida, etc., todos estos topónimos, en mi opinión son vasco-ibéricos y no tienen nada que ver con el árabe.
     Los topónimos. Como sabemos la mayoría de los topónimos son muy antiguos y normalmente suelen reflejar una situación geográfica muy concreta. Los antiguos que dieron sus nombres a estos lugares, en realidad, sólo describían en su antigua lengua lo que veían; un río, un alto, un hondo, un puente, un llano, un monte, una sierra, un camino, etc. Y todos comprendían el significado de todos estos nombres, porque describían una situación geográfica concreta, que todos la podían comprobar, porque todos la podían ver. 
     Con el tiempo, la mayoría de estos nombres se convirtieron en nombres de partidas de terreno. Que a su vez, fueron el origen de muchos de los nombres actuales de nuestros pueblos y lugares. El problema sobre el conocimiento del significado de los topónimos, empezó, cuando fueron olvidando poco a poco su antigua lengua ibérica, y se fueron olvidando del significado de sus nombres. Lo que sí solía conservarse bien, en la mayoría de los casos, era su situación geográfica y muchas veces también su antiguo nombre.